martes, 28 de diciembre de 2010

Supermercados

Los supermercados son como una gran agenda gráfica que nos recuerdan ciertos eventos durante todo el año. He aquí el análisis sociocultural por fechas* de acuerdo a las piezas iconográficas que colocan estratégicamente en los pasillos más concurridos de dichos recintos:

FEBRERO

Señales: Decoración rosada, abundancia de una extensa variedad de corazones de diversos tamaños y colores, confetis rojos y flores en la mayoría de las etiquetas.

Intensión: promover el consumo masivo de regalos empalagosos para el día de los enamorados.

MARZO

Señales: Huevos de colores, conejos con rostros amigables y cintas de colores.

Intensión: Pascua de resurrección y la insufrible tradición del conejito que esconde huevos de chocolate, aumentando no sólo los índices de morbidez infantil sino también las consultas odontológicas a raíz de caries.

AGOSTO

Señales: Banderas chilenas, adornos patriotas, cintas blancas, azules y rojas, globos de los mismos colores, sombreros de paja, vinos y uvas, dibujos de empanadas, trajes folclóricos y autóctonos, piezas musicales correspondientes a cuecas chilenas.

Intensión: Fiestas patrias, la que nacionalmente se trata de la festividad que permite la instancia de emborracharse sin culpas más que la de sentirse orgullosos del país originario.

OCTUBRE

Señales: Calabazas naranjas con rostros amigablemente terroríficos, confetis negros, violetas y anaranjados, globos de la misma gama de tonalidades sepulcrales, calaveras, huesos, zombies, fantasmas y brujas en etiquetas de caramelos y disfraces.

Intensión: Celebración del día de todos los muertos o superficialmente conocida como Halloween. Es la oportunidad perfecta para salir a pedir dulces y lanzar huevos a vecinos furibundos.

DICIEMBRE

Señales: Pinos verdes decorados con luces de colores y una amplia gama de ángeles, estrellas, cascanueces, cintas doradas, cascabeles, viejos pascueros y pesebres. Nota importante: los villancicos invaden las mentes y terminan desatando un odio irrevocable ante ellos.

Intensión: Celebración de Navidad o para los católicos, el nacimiento de Cristo. Ocasión ideal para cerrar el año con deudas y regalos innecesarios para quienes no se lo merecen o simplemente el gusto de gastar todo el dinero en comprar cosas en la época en donde su precio se dispara de manera impresionante.

Así que no se deje engañar. El supermercado no sólo es el proveedor de alimentos y enceres para su familia, es también un excelente recordatorio de que es imposible escapar de ciertos eventos socialmente adquiridos e inútilmente existentes.

*Las fechas se presentan con semanas de anterioridad al evento en sí, con el fin de meterse en la inconciencia de las personas y obligarlos a sucumbir ante la compra compulsiva y la posterior muerte.

1 comentario:

Carla dijo...

y de la basura enero y febrero con ropa e inútiles escolares, robándote el verano a menos que protestes ausentándote del super y comprándole a la vecina del negocio

(me imaginé entrando al jumbo cada vez que leía un nuevo mes)
chistosa entrada
un gran beso querida ave